El Encierro

La forma más fácil de torturar a una madre es decirle que se quede en casa con dos pequeñas bestias enfermas a guardar reposo, no vaya a ser que la bronquitis se complique y termine usted en el hospital. No ellos, si no yo, internada por la locura transitoria gestada por escasos minutos de sueño que…

Le temo a la oscuridad

Quizás les resulte cómico que una “señora” (aunque me pese ostentar éste título dos bestias lo avalan) de veinti-trece años le tenga miedo a la oscuridad. ¡Esa soy yo! No es cuestión de que piense que detrás del armario haya un monstruo, pero no me siento segura así que necesito dejar una luz prendida. Recién…